NARRADOR (como si estuviese leyendo un cuento): Y entonces
el príncipe besó a la princesa, se casaron, vivieron felices y comieron
perdices.
PRINCESA (aparece de repente): ¿¡Perdices!? Ah no, no. Yo
odio las perdices.
NARRADOR: Bueno, pero eso es lo que pone en el cuento y así
se lo estoy contando a los niños.
PRINCIPE: Pues si es lo que pone en el cuento, habrá que
hacerle caso, mi amor.
PRINCESA (enfadada): ¿Y por qué? ¿No es nuestro cuento? Pues
nosotros decidimos, no te digo.
PRINCIPE: Pues sí que empieza mal nuestro “vivieron
felices”.
NARRADOR: ¿Y si en vez de perdices coméis chocolate?
PRINCESA: No, no. Que si no nuestros hijos van a tener
muchas caries.
NARRADOR (al público): Madre mía que princesa más cabezota.
PRÍNCIPE: ¿Tú que quieres cocinar princesa?
PRINCESA: ¿¡Yo cocinando!?
(Principe y Princesa discuten)
NARRADOR: Basta, basta. Parad o no habrá final feliz. Se me
ha ocurrido algo: ¿y si hacemos otro cuento para saber que pasó después entre
todos?
PRINCIPE Y PRINCESA: Buena idea ¿Vosotros que pensáis?
(Hacia la clase)
Esta corta dramatización me la imaginé realizada por los profesores para animar a los niños de la clase en la creación literaria con una estrategia clara, la de ¿qué pasaría después?, después de haber leído cualquier cuento con la profesora.
No la usé para la actividad del bloque IV porque, como se comentó en clase, la dramatización tenía que poder ser con los niños y esta, aunque incluye a los niños debería ser ejecutada por los profesores.
Usaría esta dramatización con niños de 5 o 6 años.
Muy chula :)
ResponderEliminarTe anoto la entrada como voluntaria.